Ayer estaba haciendo una cola en un banco y se volvió a cumplir la regla del contacto visual con personas mayores: apenas miré a un viejito a los ojos, me empezó a hablar. Y yo no tengo mucho problema en hablar con nadie, así que se charló un poco con el señor
Viejito: Los 87 años no son gratis. Me duelen las rodillas y no sé porqué
jose: ¿No será la humedad?
Viejito: ¡Tenés razón! No lo había pensado. Es cierto, debe ser la humedad
jose: Y claro, con esta humedad a todos nos duelen las rodillas
Viejito: Claro, debe ser la humedad que me hace doler las rodillas. Yo jugaba básquet (aclaración: no dijo 'jugaba al básquet', sino que dijo 'jugaba básquet') y me tuvieron que operar de los meniscos. Pero quedé bien la operación salió bien
jose: ajá
Viejito: pero eso fue hace como 40 años, no creo que me duela por la operación
jose: y no, debe ser la humedad
El diálogo no siguió mucho más porque me tocaba pasar a cobrar un cheque. En un rapto de bondad, pensé en dejarlo pasar al viejo, pero preferí cobrar a hacerme el boy scout. Ya es hora de que asuma que me gusta hablar con viejos en lugares públicos
viernes, junio 09, 2006
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1 comentario:
a mi tambien me re cabe charlotear con viejitos buenhumorados!
nos vemos!!
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