martes, agosto 31, 2010

Un paso adelante

Ahora que se confirmó el festival con Delfín Quispe y La Tigresa del Oriente, recordamos que en Bien Ahí tiramos la idea hace más de tres años. No tuvimos plata para invertir en ella, pero podemos decir que, una vez más, estamos un paso adelante de la vanguardia

lunes, agosto 30, 2010

Futbolín para todos

El sábado vino a casa un amigo con su hijo de 9 años. Con el nene habíamos visto River - Argentinos la semana pasada, así que teníamos cierta confianza. Mientras jugábamos a los pases, le pregunté si en su casa tenía pelota de fútbol y me dijo que no. Le ofrecí una de las mías, porque tengo tres. Se pasó de listo, eligió la Jaboulani y le expliqué que esa es mía. Se quedó con una dorada. Le conté a mi amigo que le había regalado una pelota, me preguntó por qué y se agarró la cabeza

Kaffe

Ahora que aprendí a usar la Volturno y que tengo café colombiano, puedo decir que empecé a tomar café

domingo, agosto 29, 2010

Alguien lo tenía que decir

No sé qué me aburre más: que en la tele hablen de Twitter o que en Twitter hablen de la tele

viernes, agosto 27, 2010

Cascada de fichas

Estos días de silencio en Bien Ahí tienen que ver con que me están cayendo muchas fichas juntas, que estoy con mucho laburo y que me estoy organizando con horarios nuevos

'Y todo el tiempo te cae la ficha, por algo viejo, por algo nuevo, por algo tonto, por algo serio', canta El robot bajo el agua



La ficha cae, uno la intenta agarrar y ahí empieza la cosa

miércoles, agosto 25, 2010

Oído al pasar

'Se quejan cuando les cortan un dedo y tienen razón, pero a veces dan ganas de matarlos', dijo una señora en la parada del 160, luego de que se le escapó un colectivo

martes, agosto 24, 2010

Gazpacho

El domingo se lanzó el tercer número de Gazpacho, la coqueta revista que edita el Centro Cultural España Buenos Aires. La diversidad cultural es el eje de la edición, que incluye una crónica mía para la que entrevisté a Germán, un verdulero boliviano, a Ludmila y Román, dos ucranianos que arreglan ropa, y a Xiang, la china que vende la mejor comida de la zona. Todos viven o laburan en la manzana de mi casa. La nota empieza así:

La banda sonora de la vida de Germán es la cumbia. Pasa la mayor parte del día en su verdulería, de 8 a 22, de lunes a sábado, siempre con la radio de fondo. A veces, Fredi, su empleado, se anima a cambiar el dial y escuchan algunos hits de los ochenta pero, más temprano que tarde, vuelven a la cumbia. Y si es en la FM de la comunidad boliviana, mejor. Esa música está en sintonía con el presente feliz de Germán, que llegó de Bolivia hace trece años. Buenos Aires no lo recibió con los brazos abiertos. Vivió en una villa del Bajo Flores, trabajó más de quince horas por día en talleres textiles. 'Mis paisanos fueron los que más me quisieron explotar. Uno me propuso trabajar de 8 a 1 de la mañana del día siguiente. Le dije que estaba loco. En esa época me caminaba toda la ciudad buscando trabajo. Comía un pancho en la calle y seguía caminando'

Gazpacho se consigue en las sedes del CCEBA: Florida 943 y Paraná 1159. Si pueden, búsquense una, es la mejor revista que vi en el año y estoy feliz de haber publicado ahí

lunes, agosto 23, 2010

Choque de generaciones

Un viejo se da vuelta y revolea su bastón para empezar a caminar. No vio que justo venía un padre con su hijo de la mano. El padre mira para cualquier lado y no se da cuenta que el bastón le da en una pierna a su hijo. Al nene no le duele tanto y no dice nada. El viejo no siente que se la dio al chico y empieza a caminar, lentamente

jueves, agosto 19, 2010

Una más de Paraná

Apenas llegamos, vi unos carteles que anunciaban una fiesta de disfraces para el domingo pasado. Parecía un curro de un boliche, pero, con el correr de los días, fui escuchando que en todos lados hablaban de esa fiesta: en la panadería, en la calle, en el hotel. En el diario del sábado decían que se habían vendido 20 mil entradas y que no se realizarían tests de alcoholemia en la zona de influencia. Me fui dando cuenta que por todos lados vendían caretas, cotillón, que todo el mundo comentaba esa fiesta. Era el evento de la ciudad de ese fin de semana. Ante semejante posibilidad de quilombo, me empezaron a dar ganas de ir, que se me fueron cuando me enteré que salía 100 mangos

El domingo llegaron al hotel varios grupos de flacos que habían venido especialmente y cerca del río vimos a muchos que empezaban a tomar desde temprano. A la noche fuimos a un bar en el que me crucé con algunas personas disfrazadas. Les pregunté si estaban por ir para la fiesta y me dijeron que ya habían ido pero se habían quedado muy poco tiempo. A los 10 minutos de haber entrado, los sacaron porque sus entradas eran truchas. Y en la reventa las entradas cotizaban a $200. Me dijeron que la primera edición de la fiesta fue en el cumpleaños de uno de los organizadores y que el evento fue creciendo año a año. Se rumorea que hay sexo en todos lados y por eso reparten forros en la barra y en el baño

martes, agosto 17, 2010

Jose responde (también en Paraná)

Un auto para al lado mío y baja la ventanilla. Noto que viajan 6 personas
- Flaco, ¿sabés dónde queda Live Rock?
- Sí, está en la próxima cuadra
- ¿Y tiene onda?
- No, pero yo también estoy yendo para ahí
Live Rock, cuyo logo se parecía demasiado al del Hard Rock Café, fue el primer bar al que fui en Paraná porque tenía wi fi. Además, era uno de los pocos que cerraban más o menos tarde. Era de esos bares con luces dicroicas, teles con TN y adornos horribles. En su primer piso estaban los objetos relacionados al rock. Me sentí muy local cuando pude responder esa pregunta

lunes, agosto 16, 2010

Servicio de radio a bordo

El micro de vuelta fue mucho peor que el de ida. Directamente no los tendría que comparar. Eran de dos categorías diferentes. Uno tenía asientos amplios, se deslizaba por la ruta y su servicio incluyó una bandeja Granix. Algunos asientos del otro no se querían reclinar, los pasajeros saltamos con cada pozo y, ante el menor reclamo, uno de los choferes le sugirió a una señora rubia que dejara una queja en la terminal

En el de vuelta, pese a que era de día y que el espacio para las piernas era chico, me dormí profundamennte, como suelo hacer en todo medio de transporte. La incomodidad inicial se transformó en desesperación cuando me desperté por el volumen con el que se escuchaba un programa deportivo de radio. Me llamaba la atención la cercanía que sentía con el conductor. Giré la cabeza contracturada y me encontré con lo inesperado: tres periodistas, que subieron en Santa Fé, estaban saliendo al aire desde el micro:
- Para esta segunda fecha del torneo, el tatengue estará visitando al equipo de Chacarita, luego de arrancar con el pie derecho tras la victoria en la jornada inaugural en este campeonato que depositará al campeón en la máxima categoría del fútbol nacional. Unión no gana en condición de visitante hace casi un año, con lo cual este equipo periodístico no vería con malos ojos un empate, un punto que lo dejaría en una posición expectante en un campeonato que recién arranca pero blaca blaca blaca

Tenían dos micrófonos, dos juegos de auriculares y un maletín que parecía servir de antena o algo así. Tuvieron varios desperfectos técnicos y se enojaron porque un locutor anunció que saldrían al aire luego de 'dos anuncios'. No querían que se supiera exactamente cuántos avisos tendrían que soportar los oyentes para seguir escuchando su pormenorizado informe. Mientras participaban en distintos programas de su radio y repetían su intrascendente información, yo me dormía y me volvía a despertar con un análisis del desempeño de Colón en las dos primeras fechas o me enteraba que a otro jugador le faltaba realizar un trámite para poder debutar. Todo siempre dicho a los gritos y con ese modo enroscado de hablar, que no sé quién se los enseña

Quise distraerme comiendo pero la bandeja del micro de vuelta, con dos pálidos simples de jamón y queso y una galletita dulce con algún nombre autóctono como 'El coatí', me deprimió tanto que quedé inapetente pero muy informado

Salidas futbolinas

El bar El Banderín, la parrilla La Popular, la cantina A los amigos y el Museo de Boca fueron mis recomendaciones en Radar para hacer salidas bien futbolinas

En otro orden de cosas, me di el gusto de incluir palabras como futbolín, chomba, Claudio Paul Caniggia y bolazo

miércoles, agosto 11, 2010

Futuro de Viejo Choto

Aprendí a manejar con mi viejo y el Bólido. Íbamos hasta Costanera Sur y yo pasaba al volante cuando llegábamos. Él me daba algunos consejos muy puntuales ('detrás de la pelota siempre viene un chico'), al rato se aburría, bajaba a leer y me dejaba manejando solo. Los primeros ratos de soledad al volante era increíbles. Me ponía algo tenso pero disfrutaba mucho esa libertad. Escuchar música y manejar puede ser un placer. En esa época le tomé cariño a Costanera Sur. Las primeras construcciones de Puerto Madero recién estaban empezando y estaba todo bastante roto

Hace poco llevamos a unos amigos holandeses a dar una vuelta por la Costanera Sur, comimos unas bondiolitas y dimos una vuelta por la Reserva Ecológica, a la que nunca habìa ido. Luego de un rato de caminata, nos dimos vuelta y miramos las torres desde lejos. Eran muchísimas. Hay más construcciones de las que suponía. Se me vinieron un montón de imágenes que veía desde el Bólido en esa época. Los docks todavía estaban abandonados y mi viejo me repetía la historia de la Ciudad Deportiva de Boca que quedó trunca. Ya me veo quemándole la cabeza a mis hijos y nietos, contándoles que aprendí a manejar en esta zona cuando no había nada, igual que mi viejo me cuenta que jugaba a la pelota en un campito en el que vivían en carpa unos gitanos y yo le pongo cara de me lo venís contando desde que tenía 7 años

martes, agosto 10, 2010

Canciones que me tienen los huevos llenos

'Lamento boliviano', el tema de los Enanitos Verdes que dice 'y yo estoy aquí, borracho y loco', debería ser prohibido por 28 años y las radios que lo sigan pasando serán expropiadas y entregadas a pueblos originarios del ritmo

Igualmente, si quieren aprender a tocarla en guitarra, acá tienen una lección:

Rumbos

Rumbos es una revista que sale los domingos junto a 18 diarios de distintas provincias y en la que escribo hace como cinco años. Tiene una tirada tremenda de 400 mil por semana. Hace dos años me encontré una pila de ejemplares en un parador en Catamarca. El pueblo se llamaba Arauco, la capital nacional del olivo, y el bar tenía sólo ejemplares de Rumbos. Encontré alguna nota mía y confirmé lo groso que es escribir para gente que vive en esos lugares. Me obliga a pensar los temas desde otro lado, a evitar miradas o temáticas que sólo importan en Buenos Aires

Ayer pasé por la redacción y me llevé las últimas notas que publiqué. Hace unos meses salió una entrevista que le hice a la directora de cine Julia Solomonoff. Este es un parrafito de la nota: 'Un atardecer lleno de nubes, un bichito verde que se posa sobre una rama, unas ollas cocinándose a fuego lento, un chapuzón en un tanque australiano. Las imágenes campestres de 'El último verano de la boyita' transmiten una sensación bucólica y poética. También se puede ver el preciso momento en que un ternero recibe una cuchillada y empieza a desangrarse, cómo los jóvenes del pueblo acosan al protagonista en una pulpería o la noche silenciosa en la que el padre de Mario golpea a su hijo por haber contado su secreto. Solomonoff eludió la trampa de mostrar al campo como un lugar en el que la naturaleza brinda tranquilidad y pureza. "No me interesaba retratar una belleza postal, prefería incorporar esa mezcla crudeza y sensualidad que tiene".'




Y también me llevé el ejemplar en el que salió una nota que escribí a medias con Horacio Torres sobre los actores que laburan en publicidades. Aproveché la ocasión para darle lugar a un par de amigos, como Eugenia, que salió en la tapa con una bebida en la mano, y Lucas, compañero de La Bombachita. Aquí, una declaración suya en la que se hace el canchero: 'Lucas Stoessel es de ese tipo de personas. Ve la luz roja y se transforma. Corrió desnudo sobre una cinta mecánica, bailó arriba de un escritorio, rompió guiones para improvisar letras. "Entendí que las agencias tampoco saben exactamente lo que buscan. Al principio, me preocupaba más por hacer lo correcto y me sentía más incómodo todavía, después fui descubriendo que la actitud suma muchos puntos".'

Golpe de Estado

Esto se venía planeando hace mucho. Wallace y Gromit se engolosinaron con el poder, se creyeron eternos y yo me cansé de verlos, pero Nacholo, su padre intelectual y diseñador, no quería meter mano. Entonces acudí a la grossa Silvia, le tiré alguna idea, ella la puso en marcha, la mejoró, hicimos algunas pruebitas, y acá estamos, con diseño nuevo

¡Muchas gracias, Silvia! Los tiranos de Wallace y Gromit descansan en paz

domingo, agosto 08, 2010

Mundo Caca

La reutilización de los pañuelos descartables le dan la bienvenida a un mundo caquiento y pegajoso.

sábado, agosto 07, 2010

Otro negro al que extraño

Siempre me dio un poco de bronca que tanta gente relacionada a James Brown únicamente con 'I feel good', 'Sex Machine' o 'Livin' in America'. En parte, lo entiendo. Son mega hits, de esos que los escuchás toda la vida hasta que te llena los huevos. En lugar de empalagarme, esos tema me intrigaron, especialmente los dos primeros. Me despertaron el gusto por el funk y la curiosidad por la obra, larguísima, de James Brown. Creo que terminé escuchando a Fela Kuti porque empecé por James Brown. La primera vez que vino tocó en Obras y allá fuimos con mi amigo Dami, fana del funk. Primero entró la banda, con esos vientos que no paran nunca de bailar y esas coristas gordas con vestidos largos. Los movimientos que hacían con los brazos mientras cantaban eran hipnóticos. Dos temas después, uno de la banda presentó a James Brown, que entró con una capa con lentejuelas. Todos a sus pies. Ovación total y él meta bailar y agitar. Estaba grande y se notaba en su pasito clásico. Era más lento y menos arriesgado de lo que habíamos visto en los videos. No importaba, lo teníamos cerca y no defraudaba. Dos años después volvió y el show fue mucho peor. Ya no podía moverse, así que cada tres temas subía alguien más al escenario para distraer un poco la atención. En el peor momento del show, subió un mago que hizo varios trucos con aros e hizo desaparecer una paloma. De mientras, James Brown tocaba el teclado, al fondo del escenario

Hace una semana que no encuentro un disco suyo en mi casa, así que me puse a escucharlo por Internet. Este video arranca medio mordido pero la banda suena un avión

viernes, agosto 06, 2010

Cosas vistas

Por miedo a que se me rompa la cámara de fotos, no registré el afiche de una obra social que tiene las caras de Adriana Brodsky y Fernando Lúpiz. Es la misma que hace unos meses disfrazó a Germán Krauss de Indiana Jones

¿El publicista sigue las órdenes de los dueños de la empresa o a él solito se le ocurrieron estas ideas? ¿Por qué no los disfrazaron a Adriana y a Fernando? ¿A qué target apunta?

miércoles, agosto 04, 2010

Consejo para ciclistas (muy puntual)


La semana pasada, en tres oportunidades, me vi implicado en la misma situación: avanzo con la bici hacia una esquina. El peatón que estaba a punto de cruzar, temeroso, me ve venir y se queda parado. No sabe si avanzar y, quizás, chocar conmigo o retroceder hacia el refugio del cordón. En milésimas de segundo, debemos tomar una decisión. Hay que pasar por delante o por detrás de esa persona que no quiere morir debajo de dos ruedas

Mi consejo: comunicarnos con el peatón que no puede resolver esa duda. Hay que acercarle soluciones, mostrarle el camino. La semana pasada, opté por decirles 'pasá, pasá' (este tipo de órdenes, como en el fútbol, hay que decirlas más de una vez) y les pasé por detrás. Uno siguió retrocediendo y se comió una puteadita por no hacerme caso

lunes, agosto 02, 2010

Pequeñas rebeldías

Siempre estoy sin documentos. Esta decisión me trajo algunos problemas para entrar a algunos edificios o empresas pero siempre se resolvieron. No me gusta andar con los documentos encima y tengo la teoría, y quiero creer, que quedaron atrás los tiempos en los que la policía te los pedía por la calle. En 33 años, me los pidieron una sola vez y hace mucho

domingo, agosto 01, 2010

'Partir', de Catherine Corsini

Suzanne es la esposa de un garca millonario y se aburre en la casa que comparte con una hija, que es una pesada, y un hijo mamero que juega al tenis. Su mayor desafío es estudiar reflexología y volver a trabajar, luego de 15 años de rascarse el culo. En la obra de su nuevo consultorio conoce a un albañil español, que está ilegal en Francia y se calienta mucho con él. Son amantes hasta que, velozmente, ella deja a su marido más por calentura más que por amor, e intenta una vida nueva con el gallego. Claro que esa fantasía dura poco porque ella es una idiota que no consigue laburo y él está fuera de la ley, ya estuvo en cana y su hija de 5 años le tiene miedo. La desesperación por la guita los lleva a un plan digno de ellos. Les podría contar un poco más pero no quiero cagar a los que la vean. Me pareció una pavada y les aconsejo evitarla. Calificación: 3 Bien Ahí