Como todos sabemos, el calor es una de las principales características del verano. Todo gira alrededor de él: si hace mucho calor, todas las charlas se limitan a comentarlo. Si refresca, gataflorismo puro, se lo extraña. El calor es torturante, no deja pensar, no da respiro, no ofrece costado interesante ni misterioso. Sin embargo, es tan importante que llegamos a recordar a nuestras vacaciones según los grados de calor que sufrimos: '¡qué calor que hizo en el norte ese año!' o bien 'el lugar nos gustó mucho y, por suerte, no hizo tanto calor'
Cuando el calor agobia, como ayer, es imposible pensar. Mantener una conversación más o menos digna se hace una tarea ingrata. El calor ocupa todos los lugares que imaginemos, siempre terminamos o volvemos a él. Es el punto de cierre y de apertura de toda charla, una referencia ineludible y sofocante. Para intentar pasar un verano menos de mierda, en Bien Ahí ofrecemos algunas claves para que el calor no se sienta tanto:
1) en primer término, recomendamos no hablar sobre el calor. Siempre que tenemos un problema, este se agranda a medida que se lo vamos comentando a distintas personas. Si algo nos preocupaba un poco, luego de comentárselo a 5 o 6 personas nos preocupará mucho más. Con el calor pasa algo similar. Intente no decir cada dos minutos 'qué calor insoportable'. Además, el que está al lado suyo ya sabe que usted tiene calor
2) si no tiene pileta o amigos con pileta, recurra a la versión hogareña. Llene la bañadera y póngase en remojo. Cada cierta cantidad de tiempo, regrese al agua para volver a refrescarse. Es una solución algo pobre, pero efectiva
3) despreocúpese por el look. En los días de calor asqueroso es muy poco probable que alguien se fije en usted, por lo tanto no dude en quedarse en cuero, cubrirse la cabeza con algo que lo refresque o usar shorts que no dejan lugar a la imaginación. Todo vale con tal de tener un poco menos de calor
4) si está en la calle, haga escalas en todo negocio que tenga aire acondicionado, especialmente los shoppings, las tiendas de todo por dos pesos y los supermercados
5) Tómese más tiempo para trasladarse. Cuando hace calor, no se puede caminar a la misma velocidad que lo hace todos los días. Téngase paciencia, permítase tardar más
martes, enero 02, 2007
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