
Haber permanecido al margen del espíritu navideño durante casi toda una vida no fue gratuito, tuvo daños casi irreparables. Por ejemplo, no tengo mucha idea de qué se festeja y tampoco me acuerdo precisamente qué día es la Nochebuena y qué día es la Navidad. Creo que desde este año me voy a acordar que la cena se hace el 24 (aunque todos los años digo más o menos lo mismo). Es medio difícil de explicar qué siente un judío en Navidad y 'South Park' estuvo muy cerca de lograrlo, en un capítulo en el que Kyle cantaba 'soy un judío muy solito'
La estética navideña, su sensibilidad y sus accesorios pueden ser irresistibles para el judío. No es mi caso, pero muchos judíos sufren el síndrome de no haber armado jamás un arbolito navideño. Particularmente, no me interesa el arbolito y en su mayoría me parecen horribles, pero conozco a unos cuantos que mueren por ser invitados a armar uno y elegir un pesebre
Por suerte, hace como cinco años que con un amigo concretamos un intercambio cultural: él vino a mi casa para la Pascua judía y yo fui a la suya para Navidad. La primera vez que festejamos Navidad hicimos un plan bien completo y fuimos a la iglesia. Ahí me sentí más turista que nunca: no sabía ninguna canción (inclusive, jamás las había oído) y no terminaba de tener en claro cuándo había que arrodillarse y cuándo podíamos volver a pararnos
Quizás la idea del judío en navidad como turista es la más precisa para explicar qué siento en estos días: no estoy demasiado inserto en el festejo, pero tampoco completamente afuera, como antes. Como sea, turistas o no, Bien Ahí les desea a todos que la pasen lindo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario