Subo al 151, saludo al colectivero, encaro hacia el pasillo y veo que en el asiento de a 2 que está al lado de la puerta hay un tipo que está cortando unas fotocopias. Me despierta curiosidad y leo que son todas notas sobre rugby. El las recorta por los bordes y guarda las partes que le interesan. Aquello que no le sirve, termina en el piso
Mientras me pregunto por qué guarda notas sobre Los Pumas y los All Blacks de los 80, me empiezo a indignar por la mugre que generó. A medida que el bondi avanza, me voy maquinando con que le quiero decir algo, que me da mucha bronca que ensucie el espacio de todos (admito que me agarró un ataque de Doña Rosa) y que encima sea por notas de rugby. El habla por teléfono con su mujer, intenta dormirse, sin éxito, en dos ocasiones. Cuando se intenta dormir, me doy cuenta de que tiene algunos tics, como mover las cejas hacia arriba o fruncir un poquito la boca
Con un discurso algo calculado, antes de bajarme le digo 'flaco, tendrías que juntar toda esta mugre que hiciste'. El me dice que no hizo nada. Yo le digo que lo vi recortando y él acepta que tiró papeles al piso, pero sólo dos. Decido no dedicarle mucha más energía al asunto y me bajo, algo derrotado. Todavía me pregunto qué lo llevó a hacer toda esa mugre en el bondi y, sobre todo, a guardar notas viejas sobre rugby
Le quiero dedicar este post a Capitán Intriga, que también, cada tanto, postea estos ataques de doñarosismo
viernes, junio 27, 2008
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