Hace un tiempo, conté algunas experiencias que viví en distintas reuniones de consorcio. Sin dudas, en esos eventos maquiavélicos aflora lo peor de cada uno. Las miserias, la avaricia, el maltrato, el egoísmo: en definitiva, todo aquello que intentamos ocultar pero que sacamos a relucir apenas amagan con tocarnos el culito (decir 'culito' es muy Indio Solari)
Pues bien, el amigo y fiel lector FEde nos mandó algunas fotos que demuestran que siempre hay gente más loca que uno y consorcios en los que convivir debe ser como pasar unas temporadas en el averno. Si quieren pasar a ver los carteles, sólo tienen que dirigirse hasta la dirección que aparece en el título de este post
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