Ya van dos programas del Diego y no vi ninguno de los dos. Hasta la semana pasada, no sabía porqué me había negado a verlo. El otro día, mientras almorzaba con un amigo, él me comentó que tampoco lo había visto porque la presión que había sobre el programa él también la había sentido.
Y a mi me pasó algo parecido. Es como que sentí que todo tenía que salir bien, que el Diego tenía que estar más lúcido que nunca y que le teníamos que ganar en el rating a Susana. Es que estoy acostumbrado a sumarme a las luchas del Diego, salvo cuando Boca está en el medio.
Por otro lado, ayer me enteré que por cada programa, el Diego gana 300 mil pesos. O sea, que ya embolsó 600 lucas. Y me dio algo de bronca y me sentí medio estafado (aunque sé que sin motivo) y me parece que mejor no lo voy a ver nunca.
martes, agosto 23, 2005
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