jose: Bueno, me llevo esta bermuda, entonces
Vendedora 1: Dale, serían $55
jose: Ah, yo pensé que por mi incondicionalidad con este negocio me la iban a dejar a $50
Vendedora 1: Ehh, bueno, no sé (dudando)
Vendedora 2: (la que me conoce): Y sí, dejemosela a 50
jose: Buenísimo, gracias, nos vemos
Un nuevo éxito que demuestra que regatear no es faltarle el respeto a nadie, sino que puede beneficiar tanto al vendedor como al comprador. A los moralistas que se indignan con estos posts, los invito a callarse antes de cacarear
jueves, marzo 13, 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario