Comparto una teoría que se me ocurrió hoy: Los Ratones Paranoicos son al rock lo que el Bambino Veira al fútbol.
Es un tipo de gente que nunca te termina de caer mal, por más de que sus propios actos nos piden a gritos que los odiemos. Ejemplos: la tintura del Bambino causa dolor de ojos (por no hablar de su acusación de violación) o la edición anual de un disco en vivo o recopilación de los Ratones también genera mucha bronca.
Evidentemente, los dos protagonistas de este post también comparten su pasión por la noche (entiéndase escabio -y/o drogas- y minas, por no decir gatos). Tienen algo de Isidoro Cañones pero más cercanos al barrio. No los imagino en Mau-Mau, pero sí en Salomé (el cabaret de Córdoba y Billinghurst).
El mejor tiempo de los dos ya pasó hace rato. Los Ratones no compondrán un tema mejor que 'Enlace' y el Bambino no dará otra vuelta olímpica en su vida, me animo a vaticinar. Sin embargo, no dan ganas de que los jubilen.
Prefiero que estén cerca del rock o del fútbol, siempre prefiriendo que no dirijan a mi equipo o ir a ver un show exclusivamente de ellos. Pueden seguir en ese plan de integrar festivales (en el caso de Juanse y los suyos) o de ser un panelista de tele gracioso (como el Bambi).
Desde aquí, los saludamos y estamos a su disposición para cualquier salidita nocturna. (atenti a la perla menemista de acá abajo)
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