lunes, noviembre 29, 2010
Casino
La idea del casino como lugar glamoroso y divertido es muy linda pero no la viví de esa forma en Mar del Plata, este fin de semana pasado. Jugué $50 que se fueron como nada, rodeado de hombres desesperados, de mujeres nerviosas y escuchando las charlas entre los empleados, que eran iguales a todas las charlas de compañeros de laburo del mundo e incluyeron reflexiones sobre el clima. Fede, que siempre logra divertirse en la rula, me regaló algunas de sus fichas pero la máxima emoción que tuve fue un cuarto de pleno. Más tarde salió dos veces seguidas el cero y eso nos secó a casi todos. Creo que van a pasar otros cinco años hasta que vuelva a codearme con la diosa fortuna y sus fichas
Etiquetas:
Alguien lo tenía que decir,
Casamiento,
Como la vida misma
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
5 comentarios:
Los empleados hablando del clima? Pero así no tiene gracia, la quitan seriedad!
la idea del casino como lugar glamoroso y divertido murió en los 80... bha, digo... me parece...
jamas podria disfrutar del casino, la plata se va como agua en un dia d calor, eso ya me pone nerviosa!
Jose mis amigos son bastante fanas del casino, a mí me cuesta seguirles el ritmo también.
Creo que una clave importante es la borrachera. Todos los viejos estan mamados cuando juegan, será por eso q se divierten tanto?
Reneé: ¿pensás que fui sobrio?
Publicar un comentario