miércoles, marzo 24, 2010

Inmortal

Mi amigo Luchín me había tranquilizado, durante la tarde: 'el Nokia 1100 tiene una vida extra, ¿Ya se te murió alguna vez?'. Le respondí que no y él me dijo que entonces me podía ilusionar con que reviviera. Al mediodía tuve 30 segundos de torpeza extrema, en los que se me cayó y lo mojé (un poquito). La pantalla no mostraba nada, pero se iluminaba. Eso me dio esperanzas, no sé por qué. Lo puse un rato al sol y después lo dejé descansar todo el día. Tal vez, se había estresado con tanto ataque en poco tiempo. Hoy lo prendí y arrancó como si nada hubiera pasado. 'Inmortal', grité. Ya no es un teléfono, es un mito argentino

Actualización: hoy a la tarde me parece que se dio su muerte definitiva, sin golpes ni nada. De puro viejo. No está dando señales de vida. Lo voy a dejar descansando hasta mañana. Ojalá se despierte

3 comentarios:

Laura Brizuela dijo...

Es verdad. Yo todavía tengo uno!
Hoy si lo prendo, anda lo más bien. Además y no se porque los smartphones no lo tienen, presume una hermosa y útil linternita.
Saludos!

Anónimo dijo...

yo tengo un nokia 1108. tiene 4 años, el tuyo?

(nunca me dejó a pata, la verdad que lo amo)

Pablo Borowicz dijo...

Mi vieja tiene un Sony Ericsson K310 que se le cayó 2 veces al agua. Todavía sigue vivo (no sé cómo)