martes, enero 22, 2008

Herencia

Hoy me di cuenta que una de las herencias más lindas que me dejó mi bobe Aída es una refinada técnica para tomar soda del sifón sin morir ahogado. Por cierto, la recuerdo erutando como un camionero luego de hacerlo

1 comentario:

Unknown dijo...

Gracias por compartir esa bonita imagen, me imagine a mi abuela haciendolo