miércoles, abril 14, 2010

Apuntes del Bafici II

Levanté la puntería en los últimos días. Vayamos, nuevamente, en orden cronológico. El lunes a la noche vi 'Go get some Rosemary', de Joshua y Benni Safdie, una comedia sobre un padre bastante inestable que puede convivir sólo dos semanas al año con sus hijos. Pobres chicos, en esos días tienen suficiente bailongo y sufren las formas de cariño de su padre, que los adora, pero no tiene del todo claro qué hacer con ellos ni con su vida. Me gustó mucho la peli, sobre todo porque rompe con los lugares comunes sobre qué tiene que hacer un padre, cómo debe tratar a sus hijos y qué se espera de un adulto. La charla con los directores después de la proyección también estuvo interesante porque contaron que la historia era muy autobiográfica

Ayer fue el día de los documentales, un género que me gusta cada vez más. A la mañana fue el turno de 'Ich bin Enric Marco', una peli que tiene como protagonista excluyente a Enric Marco, un viejo que se inventó el cuento de que sobrevivió a un campo de concentración alemán y repitió su testimonio durante décadas sin que nadie lo descubriera. El documental es un recorrido sobre los distintos lugares en los que, supuestamente, estuvo preso y él va relatando lo que le pasó. Es alucinante comprobar cómo el viejo sabe exactamente qué quiere escuchar la audiencia y cómo el sentido común se va construyendo a base de falsedades. El viejo es muy chamuyero y entra en unas nebulosas dialécticas de las que intenta salir bien parado pero que, si se presta atención, se descubre que son un cúmulo de frases hechas. Conclusión: no se puede confiar en un viejo que se tiñe el bigote

Más tarde vi una peli espectacular, muy recomendable y que ojalá se estrene en todo el mundo: 'Cuchillo de palo', de Renate Costa, cuenta la historia de una sobrina que vuelve a su pueblo natal para averiguar más sobre la muerte de un tío suyo. Visita a familiares, charla con sus amigos (la elección de Miss Paraguay es increíble) e investiga en donde puede. Su tío había sido uno de los 108 homosexuales que fueron incluidos en una lista que intentó estigmatizarlos, más allá de que también fueron torturados y persefuidos. Sensible pero no por eso menos política, este documental resulta una denuncia muy eficaz contra la discriminación, sin golpes bajos y con algunos diálogos geniales ente padre e hija

Por último, ayer vi 'Hacerme feriante', de Julián D'Angiolillo, un amigo de la casa, así que fui al cine completamente bien predispuesto y, como no podía ser de otra manera, no me defraudó. Lejísimos de esos informes televisivos, en los que se muestra a la feria de La Salada como el reino de lo trucho, este documental rescata las distintas organizaciones laborales que existen en La Salada, muestra la precariedad en la que laburan cientos de familias y también deja en claro el orden que reina en ese aparente caos. Es una peli tremendamente política, desde el momento en que encuentra belleza en condiciones laborales casi esclavas hasta las escenas en las que aparece el intendente de Lomas de Zamora, que es tan lacra que parece salido de Hallmark. Se nota que Julián se ganó la confianza de los feriantes porque su cámara es casi invisible y logra acceder a escenas muy íntimas. Es otra peli que pelea duro contra los lugares comunes, los relatos amarillistas y, por suerte, los noquea con su poder de observación y compromiso con los más débiles

1 comentario:

marina k dijo...

pucha, la "go get..." me quedó sin ver y me tentaba. y la de cuchillo de palo ya no me dan los horarios.
tiene que haber alguien en este mundo que suba las pelis del bafici... al menos las que están en español, o aunque sea sin subtítulos, tipo algún programados robinhoodesco o algo así.